Escribe: Elmer
Rafael Castillo Díaz.
El
padre del presidente de la república iba a llegar a Cajamarca el día que
comenzaba el Paro indefinido en defensa del agua, no pudo montarse al avión
porque encontraron unas bombas molotov en el aeropuerto de la Ciudad del Cumbe.
Un despliegue policial nunca antes visto en la ciudad se hizo presente:
sirenas, cierre al paso de vehículos y curiosos, detenciones, etc., etc. Don Isaac
Humala no pudo estar ni apoyar al Paro.
Los
de la UDEX (Unidad de Desactivación de Explosivos) se acercaban con mucha prudencia a las
botellas (bombas molotov), que por cierto, vistos por la tele eran de un licor
fino y carísimo (de los que tomaba el Cholo de acero). ¡Qué burdo!, ¿acaso no
hay mejor inteligencia en las fuerzas del orden? Las cámaras de seguridad del
aeropuerto no grabaron absolutamente nada, y encima, los encargados de la
seguridad de madrugada estaban en los brazos de Morfeo, ¡Pamplinas!, ¿nos creen
tontos o tarados? Los que no conocen la realidad y el por qué se está luchando
seguramente habrán dicho, “¿qué espera el gobierno, nuevamente en el país el
terrorismo?, a esos indios cajachos (cajamarquinos), bala y bala”.
Se
entiende que los empresarios que han invertido en maquinarias y negocios en el
Proyecto Conga, estén con los nervios crispados y desesperados por su situación.
Hasta yo lo estuviera carambas, me imagino la presión de las financieras y los
bancos, posiblemente hasta puedan perder sus propiedades si es que no los han
perdido ya, sus prestamos e inversiones han sido de cientos de miles de
dólares, y si se suman a éstos los trabajadores que han perdido su fuente de
ingreso, suculentos, con la carga familiar incluida ¿cómo no formar un
Colectivo para que el Proyecto Conga continúe con sus operaciones? Es lógico
que alcen su voz de protesta.
Nuestro
país ha sido y seguirá siendo fuente natural para las aves de rapiña
transnacionales. Quiénes se beneficiaron con el Boom del guano de isla o del
famoso “oro negro” de nuestra selva. Acaso Iquitos es una urbe comparado con
Sao Paulo. Tenemos Cerro de Pasco, Toquepala, La Oroya, Cajamarca, una vez
terminado el botín se marchan y la extrema pobreza se apodera de los ciudadanos
que se quedan. Acaso alguna transnacional ha dejado fábricas o centros de
trabajos no afines con la mimería para
después que se retiren. Qué confianza podemos tener cuando autoridades,
periodistas, hasta poetas de alto nivel, son “comprados” con dadivas por estos
señorones para que despotriquen contra los campesinos que no desean ver sus
tierras devastadas.
Ustedes
creen que Yanacocha ¿compra el pan, la leche, la cebolla, mejor dicho, todo lo
que tiene que ver con la alimentación, no hablemos de los uniformes o artículos
de seguridad, de algún empresario cajamarquino? No señores, todo, o casi todo
es traído de la capital. ¿Dónde están sus relacionadores públicos educados en
grandes y caras universidades nacionales e internacionales (por hay un tal
Zegarra, hijo de un paisano) para que agrupen a los panaderos, lecheros,
verduleros, etc., y sean ellos los que abastezcan a esta minera?...pichón huiflas.
Me
parece bien el Paro, con algunas excepciones, Salud y Educación deben seguir
sus labores, los niños no pueden perder sus clases, menos estar en las
manifestaciones, claro, para ellos es felicidad que no haya clases y seguro
también para los preceptores, já. Los maestros deben buscar información
clasificada del problema de nuestro líquido vital y enseñarles a los alumnos
qué está pasando y por qué el gobierno se vuelve intransigente con el pueblo,
tanto así que hasta hay muertos, una cultura de información de acorde a las
edades de los estudiantes, pero en sus centros de estudios. Qué culpa tiene los
enfermos o sus familiares para que les nieguen el derecho a ser atendidos, no
pues…no hay que ser tan radicales. Es muy diferente cuando sus luchas son por
reivindicaciones salariales y de índole académicas.
Seguramente
el buen alumno de Vladimiro Montesinos y a quien admira, nuestro primer
ministro Valdez, en estos días sacará las cartas de la manga. Amedrentamiento,
captura de dirigentes por encontrárseles propaganda subversiva y algunas latas
de leche con clavos y gasolina o una fotografía del presidente Gonzalo (Abimael
Guzmán Reynoso, jefe de la cúpula de Sendero Luminoso), cierre de algunas
emisoras y periódicos, llamadas atemorizantes a los familiares de los
cabecillas,…etc. Felizmente la prensa y televisión, junto con los defensores
del medio ambiente y de derechos humanos estarán atentas, le será difícil, pero
encontrará la forma de hacerlo, téngalo por seguro.
No
caigamos en provocaciones, ni queramos darnos los valientes. Los extremos son
perjudícales, ellos tienen el poder, por más razón que tengamos no nos
enfrentemos a las armas letales. Los dirigentes tienen que tener mucho tino
para saber enfrentar las situaciones de riesgo, al gobierno no le interesará
teñirse las manos de sangre con tal de que el Proyecto Conga vaya, que no lo
consiga a base de la sangre de nuestro pueblo, no dejemos que Celendín se
convierta en la pradera de muerte y destrucción. Mientras, es casi seguro, que
los altos dirigentes se tomen un vino francés cuando las cosas terminen y se
den las condiciones que la Newmont viene imponiendo.
Wito... 14 de junio 2012.
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