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jueves, 10 de marzo de 2011

Personajes: JOSÉ CLODOMIRO CHÁVEZ MARIÑAS.

Por Olindo Aliaga Rojas y Gutemberg Aliaga Zegarra.
Sucrense con grandeza, sus contemporáneos lo recuerdan: de ojos celestes, hombre de mundo, de rara y sutil inteligencia, sagaz e infatigable, de convicciones firmes, dueño de un verbo claro, convincente y demoledor. Nació en el Huauco, el 23 de noviembre de 1894.

Sus padres fueron don Benjamín Chávez Díaz y Carmen Delfina Mariñas Chiriboga; sus hermanos: Celina, hermana gemela, y Arturo

Hijo y nieto de sucrenses, con arraigada presencia en la vida política del pueblo que lo vio nacer.

Su abuelo, don Celedonio Chávez, casado con doña Tiburcia Díaz, fue concejal en 1889 y 1900. El abuelo quiso mucho a su nieto Clodomiro; y, fue él, quien le puso el sobrenombre de Cabezón y Volcán.

Su padre ha sido alcalde por dos períodos: en 1903 y de 1931 al 1932; desempeñó con implacable mano dura el cargo de Gobernador.

Su madre dedicada a los quehaceres de la casa, esposa fiel y amorosa; buena vecina, siempre dispuesta a prestar ayuda al necesitado; matrona experimentada y curiosa (Persona entendida en enfermedades, cura a base de hierbas medicinales), curaba toda enfermedad y componía lisiaduras.

La Cerrina, como la apodaron a su madre, era de talla pequeña y de tez morena, fue natural de Hualgayoc, descendiente de intelectuales y de curas; por su apellido procedía del Ecuador, contando en aquel país con muchos parientes, entre ellos: Monseñor Chiriboga.

Sus estudios primarios los realiza, hasta el segundo año, en la Escuela Fiscal de Sucre, completándolos en la escuela particular de ese lugar fundada en 1904 por el joven profesor cajamarquino, Artemio Tavera Sorogastúa.

La secundaria la realiza en el Colegio San Ramón de Cajamarca, como era costumbre en las familias acomodadas de entonces, siendo su director recién nombrado, el ingeniero Germán Pfluker.

El año 1916, ingresa a la Universidad Nacional de Trujillo, donde estudia Derecho, en ese centro superior de estudios fue compañero del poeta y escritor César Vallejo, y de Víctor Raúl Haya de la Torre, ideólogo y político fundador del APRA.

El año 1920, se trasladó a la Universidad Mayor de San Marcos, egresando en 1921 como bachiller en Derecho.

Tempranamente, abraza ideas reformistas y las pone en práctica durante su vida de universitario, asistiendo en 1921 a las algaradas estudiantiles que según lo narrado por Basadre en su libro La Vida y La Historia, página 148 aparece, presidiendo el Comité Revolucionario de la Reforma Universitaria, de clara orientación Leguiísta, entonces; también presidía la Federación de Estudiantes. El vibrante discurso del presidente del Comité de Reforma Universitaria, señor José Clodomiro Chávez, fue leído con ocasión del Primer Centenario de la Independencia del Perú. (Ver anexo N° 01).

En 1921, se enfrentó al receso universitario protagonizado por un grupo de profesores de la ultra derecha, adversos a Leguía; entre ellos: Víctor Andrés Belaunde y Fernán Cisneros.

Ese mismo año y con ocasión del primer centenario de la independencia, el presidente Leguía le hizo una distinción de honor, de la que se aprovecharon sus adversarios para salirle al frente.

Siendo muy joven y apuesto, contrae matrimonio, en la catedral de Cajamarca, con una dama de abolengo, llamada Rogelia Quevedo, natural de Sucre. De esta boda, cuentan que el obispo no escuchó las exigencias de los consortes, para casarlos inmediatamente como era su deseo; la boda fue pomposa y muy comentada por la alta sociedad cajamarquina; fruto de este enlace matrimonial fue su hijo Benjamín Chávez Quevedo, que falleció cuando apenas frisaba los 14 años.

Estudiante en la universidad de Trujillo, entró en relaciones amorosas con una señorita apellidada Jaramillo, siendo fruto de este romance su hija Ofelia, médico de profesión; actualmente radica en Lima.

En 1923, da su examen de Grado, recibiendo el Título de Abogado en lo Civil, en la Corte de Lima; pues, la Universidad de San Marcos pasaba por un período de receso.

En 1924, entra en contradicciones con el Leguiísmo y coincide con las ideas libertarias de Germán Leguía Martínez, opositor a la política tiránica de su primo Augusto Bernardino y, por oponerse a la reelección del tirano, es deportado por un período de 5 años.

Su destierro se cumplió junto a otros adversarios al régimen, siendo embarcado en el buque A.P. PREDA con destino a Chile. En ese país logra conseguir trabajo de obrero, en una fábrica de clavos y grapas de propiedad de un judío romano. Después de dos años de permanencia en el país sureño, consiguió asilo en la República de la Argentina. En ese país desempeñó la docencia, siendo profesor de historia y castellano en el Colegio Particular Internacional.

Desarrolló labores de tipógrafo, colaboró en la revista de Ciencias Políticas; asimismo, trabajó en el prestigioso estudio jurídico Riverola Abogados, permitiéndole conocer a profundidad la legislación Argentina; dentro de sus múltiples ocupaciones se dio tiempo para escribir un libro texto de castellano.

Durante su extrañamiento en la Argentina, trabó amistad con el Zorro Jiménez, aprista histórico por los sucesos de Trujillo. En 1941 presenció el nacimiento del Gaucho Cisneros, general destacado de la dictadura de Velasco y con otras personalidades de la Argentina.

Por su actividad política, además de ser deportado, sufrió prisión en la isla de San Lorenzo. Durante el gobierno ampliado de Benavides, purgó seis meses de encarcelamiento en la prisión del cercado de Lima.

Tras la caída del bruto del oncénio, habilitado en sus derechos ciudadanos, regresa al Perú en abril de 1930.

El exilio, si bien lo marcó, también supo sacarle provecho, y lejos de mellar su moral, lo abonó en su favor; tanto político como profesional, porque, después de su deportación, se presentó como abogado del Perú y de la Argentina.

En 1930, sintiendo aún el resquemor que le ha causado el destierro viaja a Celendín, en aquella ciudad la juventud estaba organizada en la llamada Asociación Juvenil Esperanza que en esos días resolvía su filiación partidaria con el APRA; lo que motivó su desazón y malestar con los ideales de dicha organización.

Después del desaguisado que le ocasionaron los esperancistas encabezados por el poeta Julio Garrido Malaver; el Doctor es recibido por partidarios y amigos de Sucre con honores extraordinarios.

El líder que venía a reencontrarse con su tierra, después de cumplir un largo destierro, ingresó a la plaza de armas en hombros de fornidos huauqueños, fue conducido al salón municipal, improvisándose un mitin, en donde estuvieron presentes autoridades y principales del lugar. La señora Monja Zelada, le dio la bienvenida a nombre de la mujer sucrense, leyendo un extenso poema de su autoría.

Parte de los versos de aquel poema dicen:

Juventud noble huauquina
Cuánto te ha impresionado
Al haberlo abrazado
Otra vez al desterrado.
Aquel que de tantos años
A su tierra ha regresado
Dejando en brazos de su amada
A su caro hijo abandonado.

En 1931, es llamado por el gobierno de David Samanez Ocampo para ocupar la Jefatura Jurídica del Ministerio de Educación, ese mismo año, ocupó la Dirección de la Granja Escuela de Surco y de la Cárcel de Menores.

En 1938, regresa a la Argentina, con la idea de radicar en ese país; pero el amor patrio, fue más fuerte y después de tres meses de estancia, emprendió el retorno para servir a su Perú y a su bien ponderado Sucre.

En la década del 40, contrae matrimonio por segunda vez, con la señora Florencia Valderrama Suárez, natural de Lima; de esta unión son sus hijos: Clodomiro, abogado como su padre y Benjamín, radicado en Sucre.

En 1939, es elegido con alta votación popular, diputado por la provincia de Celendín, integrando la lista del ingeniero Manuel Prado, en su campaña política, los sucrenses acuñaron la frase: Chávez y Prado.
Como diputado oficialista, defendió con ardorosa pasión al presidente Prado y a su gobierno que aplicó una política económica de capitalismo urbano.

Su labor parlamentaria estuvo orientada a la defensa de toda causa justa, comportándose como digno representante del pueblo que vela por el bienestar y seguridad de sus representados.

El 5 de agosto de 1940, en sesión del Parlamento, pronunció un elocuente discurso de claro deslinde con los conflictos del viejo mundo que derivaron después en la Segunda Guerra Mundial, en uno de los acápites de su discurso dijo: "a nosotros los americanos, todavía no se nos ha nublado el criterio, para comprender que la mejor forma de vivir sobre la tierra, diferenciándonos de las bestias, es gobernándonos por nosotros mismos, esclavizados al derecho escrito.

Por eso, el régimen del gobierno que ostenta hoy el Perú, es el eco fidelísimo de su historia: orienta y sirve a la democracia con su jefe insigne, don Manuel Prado; acomodándola, claro está, a los nuevos dictados de la economía que quiere pan, abrigo y habitación, para que explotado y unificado, vuelva a ser el banco de oro de su gran pueblo". Al final, la cámara acordó que el discurso del doctor Chávez sea publicado.

Cumplido el primer año de su diputación, publicó un informe, que en forma de libro, lo entregó gratuitamente a sus votantes.

En 1944, publicó el tercer tomo de su libro: Fragmentos de mi Labor Parlamentaria, a través del cual, informó los 5 años de su trabajo como diputado en el Parlamento.
En la introducción de este interesante informe dice: "Como éste es el último año de mi período parlamentario, debo dar cuenta de mis obras que ocupan todo el territorio de la provincia, con una explicación sucinta de alguna de ellas, para que comprendan que son razones, sólo razones las que han pesado en mi ánimo para comprender pronto o tarde, pero para comprender".

El 14 de octubre de 1945, solicitó su inscripción en el Centro Progresista Sucre, la carta dirigida a la junta, pidiendo se le admita como socio de esa institución sucrense dice lo siguiente:

Lima, a 14 de octubre de 1945.
Señora Simodosea A. Chávez de Horna,
Secretaría de Prensa y Propaganda del Centro Progresista Sucre. Ciudad.
Mi estimada señora:
No puedo dejar de expresarle a Ud. y a todo el núcleo de sucrenses de esta capital, mi aplauso por la hermosísima obra de haber constituido el Centro Progresista Sucre, dotándolo todavía de su órgano de publicidad titulado La Voz de Sucre. La finalidad que Uds. persiguen, de asistencia mutua y de progreso de nuestra circunscripción, es tan noble, que han de contar con el apoyo de todos nuestros codistritanos; sobre todo, para hacer brillar, desde esta capital, las virtudes de los hijos de Sucre, que se asientan en valor para decir siempre la verdad, como la entienden.

Cuénteme, pues, en sus filas y con el único significado que caracteriza el orgullo del sucreño dentro de los suyos, DE VALER MÁS QUE UNO, porque VALER MÁS QUE UNO O MENOS QUE UNO ES, PARA NOSOTROS UNA OFENSA.
Cordialmente de Uds.
J. CLODOMIRO CHÁVEZ.

El año de 1945, participó en las elecciones generales, representando a la provincia de Celendín; su rival ante quien perdió la lid electoral fue el aprista y poeta Julio Garrido Malaver.

Motivaron su derrota el desgaste político al lado del gobierno y el nuevo mensaje del APRA que se presentó formando parte del Frente Democrático Nacional.

En el escrutinio de las ánforas pertenecientes al Huauco, hoy Sucre, se contabilizó un solo voto aprista, y que más adelante se supo fue del profesor Víctor Sánchez Quevedo, apodado el Chirre; y, en venganza, según lo refiere el escritor Julio Garrido Malaver, en su obra
Para ser libres, fue relevado de su puesto de profesor por la influencia del doctor Clodomiro, en represalia por su apoyo al candidato aprista.

En 1951, fallece su padre don Benjamín Chávez.

De 1957 a 1958, mantiene relación epistolar con el alcalde de Sucre, señor Felipe Zegarra Silva. El Alcalde socialista, quien, no obstante su distinta concepción ideológica y distante de la del doctor, fue su principal vocero de campaña y no vaciló en señalar que el abogado del Perú y la Argentina, era un conservador de derecha.

En la carta que glosamos es notaria lo bien que apreciaba don Clodomiro al alcalde socialista.

Lima, 25 de octubre de 1957
Sr. Felipe Neri Zegarra. Sucre.
Mi estimado Amigo:
Acabo de recibir tu atenta y te expreso que nadie te ha de cambiar y que sigas adelante con tu labor benéfica. Habla con el Prefecto y que te dé todo lo que quieras.
Hay que hacer la reunión de Alcaldes en la capital de la provincia, con la finalidad que antes te he indicado.
Asimismo, cada quince días o cada mes hacer un telegrama al Ministro de Fomento, al senador Cacho Sousa, al Comercio y a la Prensa, pidiéndole que destaque el ingeniero que repare el túnel y que emprenda la construcción de carreteras con la parte del fondo económico asignado a la Provincia.
Adelante Felipe Neri, el satélite ruso anuncia una próxima nueva era. Se acabarán los parásitos de la riqueza.
Te saludo atentamente.
Firma de Clodomiro Chávez.

Alejado de la política, vive exclusivamente para el ejercicio de la abogacía en su estudio jurídico ubicado en la avenida Grau N° 1599-Oficina 502 del edificio Lux, en Lima, su rutina establecida es su casa de Chorrillos y la oficina; los papeles de sus procesos y el poder judicial; su relación laboral con su secretaria Emma y su pueblo.
Anciano, sufre una caída en las escaleras del viejo edificio del Poder Judicial, el accidente no lo arredró y desde su silla de ruedas continuó practicando la jurisprudencia.

La muerte lo sorprende el 21 de junio de 1978, a las 11 de la mañana, en su domicilio, víctima de una insuficiencia cardiovascular, a los 84 años de edad, se apagó el Volcán.

El 13 de mayo de 1992,14 años después, sus restos, junto con los de su esposa, fueron trasladados del cementerio El Ángel a su tierra natal, por gestión del alcalde, Julio Horna Collantes, para cuyo efecto nombró una comisión integrada por sucrenses residentes en Lima: Luis Marín Zavaleta y Olindo Aliaga Rojas.

El féretro, fue recibido con honores de caudillo en el sitio denominado El Desvío, escoltado por caballos de paso, homenajes y arquerías de flores; desde el pueblo de José Gálvez, los ataúdes fueron llevados en hombros de sus paisanos hasta el distrito de Sucre; a su ingreso, repicaron las campanas, y el féretro conducido al salón de actos del municipio, en donde se tenía preparada la capilla ardiente.

El día 14 de mayo, sus restos mortales fueron sepultados, en el Mausoleo de los Hijos Ilustres de Sucre, en el cementerio general del pueblo, hallando descanso definitivo, en el entierro más grande y multitudinario que se recuerde en Sucre.

Un epitafio escrito en bajo relieve, sobre la marmórea losa que cubre su tumba dice: "¿Sabéis quién fue J. Clodomiro Chávez?. Es la mente más fecunda, tribuno de espíritu abnegado y austero que con mayor capacidad ha servido a la causa de su pueblo."

SUS DETRACTORES
José Clodomiro Chávez Mariñas tuvo muchos enemigos y los más encarnizados fueron, los celendinos agrupados en la llamada Asociación Juvenil Esperanza, liderada por jóvenes estudiantes celendinos: el Cholo Mori, Javier Tavera, Fermín Canto, Mario Quevedo, Julio Garrido Malaver y otros jóvenes vehementes que simpatizaban con el naciente partido de las alianzas.

Había en ese enjambre de malcriados, unos, codiciosos; ofendidos otros y un resto, enemigos gratuitos de oficio. Entre los agresores se encontraban profesionales y algún escritor que para ser leído y por hacer gala de su feroz fanatismo aprista lo llenó de venablos, tal es el caso del poeta Julio Garrido Malaver, dedicado a la decantación de su partido y a malquistar al político de Sucre.

Sus intolerantes y gratuitos adversarios, no le perdonaron que un hombre grande, nacido en un pueblo igualmente prócer, le hiciera sombra a la provincia, que su ego les hacían creer que deben ser los primeros en el colofón nacional de la patria.

Los otros, los anodinos, los amotinados, mojando la punta de aquella arma terrible en inmundicia, odio y venganza, trazaron la amenazadora pluma en pasquines que inundaron toda la ciudad.

No menos violenta fue la acción de la turba bulliciosa, que muchas veces se fue de manos, armando grescas callejeras. Contaba el paisano Franciles Silva, en una oportunidad, un hombrecito enano y albino que respondía al sobrenombre de Lagañoso de Celendín y según le contaron a él, era hijo incestuoso, cayó del balcón de una casa ubicada en la calle El Comercio de Celendín, junto al tercio de alfalfa que le ordenaron la arrojara al doctor y a su comitiva.

La rudeza de sus enemigos, sin embargo, no pudo quebrar su alta moral de político, manchar su honra de huauqueño honrado, ni arriar su ideal del hombre consecuente, dispuesto a jugarse la vida por lo que él pensaba y creía.

SU INICIACIÓN POLÍTICA
Cuando Nació J. Clodomiro Chávez, su hogar al igual que en el Perú, era lugar de ardiente inquietud; mientras que afuera, combatían descarnizadamente pierolistas y caceristas, en aquella casa se discutían hasta el cansancio los asuntos del pueblo.

Tanto su padre como sus abuelos fueron actores de la vida política y municipal del pueblo.
Don Benjamín, era un próspero negociante de clase media acomodada, vinculado a la política, representó al gobierno desde su cargo de Gobernador.

Civilista virulento, ligado al pierolismo, admiró a Manuel Bernardino Pérez, conocido como el Burro, paradigma del civilismo y gran tribuno que representó a Cajamarca.

Don Benjamín, a menudo, solía recibir en su casa al joven Nazario Chávez Aliaga. Cuando se reunían, el padre, un civilista duro de roer, los jóvenes: Clodomiro liberal y Nazario que alardeaba de populista; a doña Carmen se le ponía la piel como carne de gallina, porque estos tres políticos natos discutían hasta el paroxismo.

Es este marco de contienda político familiar que impulsa a Clodomiro iniciarse en el campo de la ciencia política. Siendo estudiante, compartió y luchó a favor de la reforma universitaria, llegando a ser líder de ese movimiento estudiantil.

Graduado de abogado, definido como hombre de derecha moderada, abraza el Leguiísmo; pero más tarde y por oponerse a los planes del dictador, es deportado y cuando se le son restituidos sus derechos ciudadanos, siempre desde la derecha da curso a sus ideas democráticas y apoya de modo vehemente a Manuel Prado, un capitalista urbano dedicado a la banca y las finanzas.

En el Congreso, su ideal político se correspondió con los intereses de grupo, producto de esa correspondencia fue el apoyo que recibió del diario El Comercio de propiedad de la familia Miro Quezada, a su candidatura primero y luego, a su gestión congresal, que en términos generales fue del gusto del sistema capitalista.

SU OBRA PARLAMENTARIA
•          La obra ejecutada por el doctor Clodomiro Chávez, desde el parlamento, a favor de la democracia del pueblo peruano y obviamente en pos del adelanto de la provincia, abarca varios aspectos, en esta biografía solo anotaremos lo más relevante.

•          Creación de los centros escolares en todo el ámbito de la provincia de Celendín; tanto para hombres como para mujeres. En Sucre, le dio el nombre de Andrés Mejía Zegarra a nuestro Centro Escolar de Varones y creó la escuela de mujeres. Creó la escuela de primer grado de varones y mujeres de Miguel Iglesias, Huañambra, el Tingo y Huasmín; la escuela mixta de la Tranca, Malcat, Llavidque, Cochapampa, Cajén, Conga de Urquía, Calconga, Bacón, Cusichán, La Quinua, Saucepampa, Quillamachay, Llaguán, Chalán, Chumuch, Aliso, Bellavista y Mitopampa.

•          Gestionó el cambio de nombre del Colegio Celendín por Colegio Nacional Javier Prado.

•          Creación de los puestos de la Guardia Civil en los distritos de Sucre, Chumuch y Oxamarca.

•          Instaló la Policía de Investigaciones en Celendín.

•          Logró para los concejos provinciales y distritales, subvención por parte del Estado.

•          Cambió el nombre de los pueblos del Huauco, Huacapampa y Lucmapampa por los de Sucre, José Gálvez y Jorge Chávez respectivamente, siendo elevada a la categoría de ciudad el pueblo de Sucre.

•          La obra faraónica que debería llevar su nombre es la construcción del túnel de 900 metros de canal.

•          En el Parlamento planteó importantes observaciones a la Ley Plebiscitaria N° 8929 presentado por el Ejecutivo.

En su Cámara presentó los proyecto sobre: Abigeato, Ratificaciones Judiciales, Nuevas Causales de Divorcio; al respecto de este proyecto el periodista Federico More ha escrito un libro con las encuestas de su semanario Cascabel.

•          Participó en muchas conferencias, periodismo escrito y radial.

 De Personajes de la Historia Sucrense, abril 2008.

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ANEXO N° 1

Discurso del Dr. Clodomiro Chávez Mariñas.

"Sr. Presidente de la República y Maestro de la Juventud;
Excmos. SS. Embajadores, y miembros de este alto Cuerpo Diplomático; Generosos amigos del Perú;
Señor Ministro de Instrucción; Compañeros:

Han querido las circunstancias que la juventud peruana esté representada en el primer Centenario de su Patria por un Comité Reformador, que encarna la voluntad de la mayoría de los estudiantes para la solución de un problema universitario; pero que representa la juventud entera, en ocasiones como ésta, porque, cuando se trata de exteriorizar el sentimiento patrio, todos tenemos en el mismo sentido el pensamiento y el corazón.

Ha tocado, pues, a esta institución transitoria el incomparable privilegio de invitar a la casa de los estudiantes a vosotros Excmos. Embajadores de las Repúblicas de México, Argentina y Colombia, lo mismo que a los gallardos paladines de la causa peruana, Drs. José León Suárez, Leopoldo Fernández Ross y Comandante Antonio Tassi, para tributaros, en presencia del jefe del Estado y Maestro de la juventud, solemne homenaje de admiración de cariño y respeto, y expresar, al mismo tiempo, nuestra sincera gratitud a los universitarios colombianos y argentinos, por los mensajes que nos han dirigido por intermedio de los secretarios de sus respectivas embajadas, el distinguido poeta Dr. Eustacio Rivera y el joven campeón de la justicia y de la fraternidad de las naciones de este continente, Dr. Moreno Quintana.

Los pueblos que hoy tan dignamente representan Caso, Restrepo y Duprat, indudablemente que han experimentado la misma conmoción que ha experimentado mi patria al celebrar su Centenario; por eso, sus gobiernos, interpretando el sentir de la opinión pública han acreditado un cuerpo diplomático que signifique todo el amor y la confianza de que necesitan las naciones para vivir amando su existencia, cualquiera que fuese su estado evolutivo en el concierto universal, convencidas de que, si se consagran al cultivo de la ciencia y de la virtud, se han de hacer merecedoras del aprecio y del respeto de los pueblos cultos.

El progreso, que trasluce la historia jurídica internacional y diplomática, hace esperar para un porvenir, quien sabe no muy remoto, el pleno reinado del principio cristiano de la fraternidad de los pueblos, la más sublime de las conquistas de la vida humana; vislumbrada ya desde la independencia, por el genio de Bolívar: síntesis de toda la grandeza de que pudo ser capaz en su época la tierra de Colón. Tan maravillosa metamorfosis, que levantará muy alto los destinos de la Creación, seguramente, que se ha de operar en los pueblos de distinta composición étnica, sin perder el sello de su personalidad, ni los rasgos de su fisonomía; pero no en los que tenemos ¡la mejor de las semejanzas! de la sangre y del idioma; nosotros estamos llamados a fundirnos, a formarnos una conciencia, para cultivar una aspiración en el horizonte de una sola patria.

La juventud peruana, amante de un porvenir que responda al mayor bien de la humanidad, siempre se ha mostrado optimista, contemplando el futuro de su patria, conjuntamente con el de América y con el todos los pueblos del Universo; ella no puede dudar de que la solidaridad será la ley común; sobre todo, ahora, después de la tremenda catástrofe, que ha enseñado a los pueblos la inutilidad del poder y de la grandeza, cuando no saben amar y respetar.

Tenemos fe en que la simple opinión moral de las naciones, formada en un ambiente de justicia, ha de ser suficiente para obligarlos a reivindicarse, ante sí mismos y ante la conciencia del mundo, a los pueblos que ya por dolo, por ignorancia o por error, rompieron el equilibrio de las relaciones internacionales, enarbolando el negro pabellón de la conquista; y el orden y la paz, fundamentados en el derecho, constituirán entonces el cielo que cobije a la especie en su incesante obra de perfección.

Y la juventud peruana ansía, que los pueblos sin mancha de la América Latina inciten con sus costumbres y con su ejemplo a todos los pueblos de la Tierra, a la realización del acercamiento solidario, a fin de que se eliminen para siempre del escenario humano las luchas del hombre con el hombre, y sólo quede la lucha de todos contra la ignorancia: fuente inagotable del mal, que limita la dicha de los racionales.

Recibid, pues, Ecmos. Señores embajadores, y miembros de tan altos cuerpos diplomáticos e invitados especiales, el agradecimiento y homenaje que, de todo corazón os rinde la juventud, por el honor que habéis hecho a su patria, viniendo a compartir con sus hijos la satisfacción de celebrar su Centenario.

Señores secretarios de las Embajadas Colombiana y Argentina: vosotros que sois portadores de los mensajes que nos han enviado nuestros hermanos de Colombia y Argentina, símbolo de la estimación y del cariño que nos profesan recibid también nuestro agradecimiento y la reafirmación de nuestras promesas de trabajar con tesón, hasta ver realizados los ideales del verdadero engrandecimiento del Continente.

Y vos, Excmo. Sr. Embajador de la República Argentina, vais a permitirme aprovechar de este instante para cumplir el encargo con que ha querido honrarme la "Sociedad de Bellas Artes de Lima", de entregaros el himno al "Protector San Martín", dedicado al Ejército Argentino, que os mostrará, una vez más, el profundo y merecido afecto de los peruanos.
 

4 comentarios:

  1. EXELENTE EJEMPLO DE GRAN PERSONA

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  2. mi abuelo siempre me contaba que, cuando niño, llegó Don Clodomiro a Celendín y pudo presenciar toda la gresca, cuando se arroja el lagañoso entre otra ofenzas físicas que no vienen al caso. Sin embargo, me contaba emocionado que cuando no se pudo más, los Huauqueños (heroicos como siempre) decidieron hacer uso de sus armas para lanzar disparos al aire. Fue en ese momento que todos los "valientes" agresores no tuvieron mejor opción que meterse en las acequias para evitar las balas y el paso de los caballos. Al día siguiente volvieron para continuar con todo y encontraron un Celendín en silencio. Una lástima por todo lo que pasó, aunque siempre sentí un tono de justicia en mi abuelo, que admiraba a Don Clodomiro por compartir el mismo nombre. saludos

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  3. Posiblemente soy la última hija de Clodomiro. Cuando termine la secundaria tuve curiosidad de conocerlo y lo visité en su oficina en la Avenida Grau, conversé con el pero no le dije que era su hija. No se si mis otros hermanos están vivos pero se que uno de ellos creo que Benjamin vivió un tiempo en Celendin, intente comunicarme con el pero pienso que tal vez piense que busco dinero, lo único que buscaba era conocer a mi familia por parte paterna.

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