Mayo temporada de fiesta en nuestro pueblo,
casi diariamente tenemos cohetes, juegos artificiales, ceremonias, procesiones,
júbilo, popular.
Este año el mes de las flores será diferente,
será histórico por la puesta en funcionamiento de la mini central
Hidroeléctrica Yungapata, que dotará de luz a Sucre y a 1 ó 2 de sus anexos.
En esta colosal obra participó el pueblo que,
uniendo fuerza y talento logró sobreponerse a la miseria impuesta por gobiernos
indiferentes al dolor popular, sorteando una y mil peripecias como las hazañas
de Aquiles.
La planta, con sus aproximadamente 100
Kilovatios de energía para uso industrial y doméstico hará de Sucre, un pueblo
con grandes potencialidades de desarrollo, colocándose a la altura de los
tiempos modernos que vive el mundo: La Cibernética.
Pero el alivio casi espontáneo será solucionar
la situación del ama de casa, tejedora de sombreros desde tiempos inmemoriales
al pie de un lamparín humoso y de luz mortecina.
No es que estemos alentando al oficio que ahora
atañe a la mujer sucrense, todo lo contrario, lo sabemos un oficio que ata de
pies y manos a la practicante y la luz es la primera gran reivindicación. Por
lo antes dicho será necesario que el servicio eléctrico llegue a todos los
hogares, sin precios prohibitivos, con tarifas que den acceso aún a los más
pobres.
Queda pues, luego de ver la tangible realidad,
que significa tener fluido eléctrico, agradecer al pueblo en su conjunto, a los
Sucrenses allende los mares y a toda mano, aún a las más escépticas, con cuya
participación hicieron posible la obra y nos enseñaron que cuando los hombres
se unen, es factible tocar la bóveda celestial.
Alma Sucrense, 1994.
EL MUS Y LA HIDROELECTRICA
La Asociación
Movimiento de Unidad Sucrense -MUS- no sólo es intento de aglutinar con un
marco integrador a los hijos de Sucre; concretamente, es búsqueda y acción para
el desarrollo del pueblo en todos los factores.
Es por su filiación
sucreñista que el MUS alentó y colaboró con la mini central desde que está
fuera un proyecto embrionario (acta MUS N219 del 28 de Agosto de 1987 - N2 7
del 16 de Setiembre de 1990) que a decir de nuestro amigo y socio MUS, Puricho autor del diseño no la concibió
como un proyecto de gran envergadura. Su intención fue sólo mejorar en algo la
ya existente.
Con ésta idea integran
una comisión, además el profesor Luis Escalante del Águila, el Ingeniero
Segundo Sánchez e integrantes del Frente se lanzan tras la tarea que al
principio parecía una batalla contra inexistentes molinos de viento.
Un buen día esta
comisión bajo los rayos de un sol urticante, enrumba sus pasos en pos de la
gran tarea: Buscar el lugar apropiado para instalar la casa de fuerza, en la
travesía del barrio Miraflores secos de sed hacen alto, en la tiendita, de SHOJ
TEJ, para tomarse una bebida. Entre sorbos y altruismos el más cucufato de la
comitiva, dice suplicante: "Ojalá San Antoñito nos ayude", a sabiendas
que a San Antonio sólo se le puede pedir novias, tal como le retrucó otra voz
con tono rectificatorio.
El viaje continúa
después del consabido "salud con todos", a la altura de la Pampa El
Común y para ganar tiempo acuerdan "bandear" el túnel. Este es un subterráneo
de 800 metros por entre el cerro y por donde discurren las aguas de la otrora
laguna El Huauco.
Después de examinar el
terreno, aguas abajo por la quebrada riscosa en el lugar denominado CONGAPATA a
400 metros de la desembocadura del túnel, sobre la margen izquierda del río
Lealmayo, encontraron al fin el lugar ideal para llevar adelante el proyecto.
Poco a poco el
proyecto fue tomando forma, una Comisión viaja a Lima a fin de solicitar ayuda,
con pocos resultados.
El señor Wilson
Zavaleta, ha tomado conocimiento de la noble tarea y el mes de setiembre de
1977, gestiona la donación de herramientas a través de COOPOP ,y conjuntamente
con el MUS se compromete colaborar en el proyecto, sólo, se requería el estudio
técnico que por desgracia no había, como no había ayuda del Concejo.
El señor Ingeniero
José Mariñas será quien informe al Comité Pro Luz integrado oficialmente por
gente del Frente, las inquietudes y deseos del Señor Zavaleta y del MUS.
A raíz de este
informe, el Comité opta por cambiar el lugar de la pelton a otro más retirado
denominado YUNGAPATA, donde actualmente se levantada minicentral de ese nombre.
Luego de ese cambio
trascendental, el Comité se mostró muy activo, sacando una tras otra las
pruebas de agua con resultados positivos aún en épocas de estiaje.
Pero para materializar
la ayuda ofrecida desde Lima se requería el proyecto, incluido planos de pre
factibilidad, de factibilidad, de red urbana, entre otros.
El 20 de Noviembre de
1988, se firmó un convenio entre COOPOP - PAIT MUS recomendado por el señor
Wilson Zavaleta que para ese entonces trabajaba en dicha entidad estatal, con
la finalidad de solicitar material y maquinaria.
Por esta fecha es
integrado a la ya formada comisión Pro Luz en Lima el señor Jesús Zegarra, experimentado
técnico electricista, servidor de Electro Perú con amplios conocimientos en
centrales eléctricas y fue él quien consiguió los planos de red secundaria o
urbana que posibilitaron la aprobación de la solicitud de ayuda.
"Llegaron los
embajadores de Sucre", con éstas palabras solía recibir el señor Pescio,
gerente de almacén, a nuestra comisión que además la integraron los señores: Héctor
Zelada, Nazario Reyna, Cecilio Aliaga y José Aliaga encabezados por Wilson
Zavaleta, hombres cuyos nombres merecen ser escritos en letras de molde, igual
merecimiento tiene don Néstor Zegarra Silva que apoyó con la movilidad para
transportar los materiales.
El material
conseguido, en ese organismo estatal fácilmente supera según fuentes bien
informadas los 600 mil dólares, que a groso modo representa el 80 por ciento de
la mini central.
El MUS también firmó
un convenio con el concejo de Sucre, para cubrir el 25 por ciento del costo de
la turbina Pelton, dinero conseguido con la ayuda generosa de los paisanos a
través de una cruzada económica.
Con los resultados a
la vista, como son: iluminación de las calles del pueblo e iluminación de la
cruz levantada en uno de los cerros guardianes de Sucre, la preocupación de la
Institución no ha terminado, sigue abocada en contribuir hasta la total culminación
de la obra YUNGAPATA, esperemos que una vez terminada ésta, la Asociación
oriente su preocupación porque el servicio llegue a precio justo a todos los hogares
del pueblo. Si esto sucede, el MUS habrá logrado apagar para siempre los
lamparines tan dañinos para la población fundamentalmente pobre, que así sea.
De la revista Alma de Sucre, 1994.
Enlace relacionado: Central Hidroeléctrica de Yungapata.
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