Escribe: Ing. Secundino Silva Urquía.
LA CIUDAD DE SUCRE Y SU HERENCIA VIRREINAL.
El avance de la tecnología del concreto, nos permite ahora obtener adoquines de alta resistencia, variadas formas e incluso atractivos colores. Entre las ventajas de usar este tipo de elementos para pavimentar, podemos mencionar las siguientes: son fáciles de fabricar, son estética y funcionalmente similares a los típicos empedrados, son fáciles de reparar o mantener; no requiere personal especializado para su colocación y luego de culminada, la vía se abre de inmediato al tránsito y lo que es más importante a un costo de hasta 30% más barato que el pavimento de concreto.
Con la influencia
española esta técnica de pavimentación se traslada a las ciudades
fundadas como Cuzco, Cajamarca, Arequipa y hasta en Lima, ciudad capital
del virreinato, se llegaron a usar los pavimentos de cantos rodados o
empedrados.
En el 2003, en el Perú felizmente se aprobó la Norma Técnica Peruana NTP 339 611 2003, que establece los requisitos que deben cumplir los adoquines de concreto para la pavimentación de vías.
Fotos N° 05 y 06. Calle y vereda empedradas.
Herencia felizmente conservada en la calle San Blas – Cuzco (Perú).
Sucre, capital
del distrito del mismo nombre, es una típica ciudad andina que aún
conserva algunas marcas de su herencia virreinal y primeras décadas de
la república: Su iglesia matriz, sus casas con balcones de balaustres de
madera torneada y techos a dos aguas con cobertura de tejas; y algunas
de sus calles empedradas.
LA DECISIÓN DE CAMBIAR EL EMPEDRADO DE LAS CALLES.
A partir de la
década de los ochenta del siglo ya pasado, so pretexto del deterioro del
empedrado de las calles, a alguien se le ocurrió reemplazarlo por losas
de concreto simple (Mezcla de cemento agregados) y empezaron por la
plaza de armas.
Puede ser que el
diagnóstico del problema, si es que se hizo, haya sido en parte certero,
pero a la luz de los hechos y los conocimientos estamos totalmente
seguros que la solución adoptada fue la peor. Para tratar de entenderla
me permito ensayar una hipótesis: La ciudad de Sucre carecía de un
adecuado sistema de evacuación o drenaje del agua proveniente de la
lluvia (aguas pluviales) y fue el discurrir de éstas lo que iba
deteriorando el enrocado o empedrado de sus calles. Paralelamente se
presentó la necesidad de construir las redes de desagüe o
alcantarillado, era oportunidad entonces de darle un aire de modernidad a
la ciudad y que mejor empezar con su Plaza de Armas. “Vamos a
modernizar la ciudad”, parece que fue el lema de los autores e
iniciadores del desatino.
Foto N° 01: Calle empedrada de Sucre. |
Lamentablemente,
los sucesivos gobiernos municipales persistieron en el error,
mantuvieron el equivocado concepto y siguieron el mal ejemplo de regar
cemento por las calles de la ciudad de Sucre. Equivocadamente no pocos
sucrenses reclaman, elogian y aplauden ese tipo de obras en la ciudad
capital de nuestro distrito. Pero también se dejaron escuchar aisladas
voces de protesta y aún se escuchan las de algunos ciudadanos e hijos
sucrenses disconformes. Estamos entre ellos, con los que sin estar en
contra del progreso o la modernidad, sostenemos que existió y existe
otra alternativa de solución al problema, para evitar que décadas de
invalorable tradición andina desaparezcan para ceder su lugar a esas
frías y costosas losas de concreto. Hoy que los sucrenses contamos con
medios de comunicación abiertos a la crítica, me permito hacer una que
es constructiva, porque de construcción se trata y algo de eso sabemos.
ALTERNATIVA PARA PAVIMENTAR LA CIUDAD.
La construcción
es una actividad industrial y técnica, ampliamente estudiada por la
Ingeniería Civil; así, estas opiniones se dan fundamentalmente desde ese
punto de vista. Pues al lector le será muy fácil entender que tal
actividad y profesión están muy ligados a lo histórico y cultural, tal
como es el espíritu y línea editorial de esta publicación.
En la Foto N° 01,
se aprecia la sección y característica típica de las principales de
calles de la ciudad de Sucre, hasta antes de la construcción de su red
de desagüe. El empedrado era simplemente apoyado en el suelo natural,
las juntas que quedaban entre las piedras no eran selladas por que el
agua de lluvia se filtraba por estas fácilmente y afectaba el suelo de
soporte, además que generaba el crecimiento de pasto, cuya eliminación
era un gasto para el vecino. En el eje central aparece la acequia
“revestida” con piedras talladas, que le garantizaban cierta
impermeabilidad en su fondo y costados; era el inadecuado, rústico y
primigenio desagüe de la ciudad, el que en época de lluvias eran
desbordado por el caudal incrementado por las aguas pluviales y su flujo
afectaba aún más al empedrado de las calles.
Foto N° 02: Calle actualmente pavimentada de Sucre. |
En la Foto N° 02,
se muestra la sección y estado actual de las principales calles de
Sucre, que han sido pavimentadas con concreto simple. Su funcionamiento
frente a las aguas de lluvia será efectivo, siempre que se hayan
diseñado bien y construido adecuadamente los canales laterales de
evacuación o drenaje de las aguas pluviales. La pendiente “a dos aguas”
de la losa hacia los costados, técnicamente conocido como bombeo, no
debe permitir que el agua se estanque en el pavimento, menos que esta lo
dañe con el tráfico vehicular o que moleste al transeúnte.
La foto N° 07
muestra la textura acabada de una vía pavimentada, alternativa muy
conveniente para las calles de una ciudad andina como Sucre, usando
adoquines prefabricados de concreto. La elección de la forma, espesor y
resistencia del adoquín a usar, dependerá del estudio y diseño que se
haga para cada una de las calles, según el tráfico de vehículos por
estas sea liviano, mediano o pesado.
El avance de la tecnología del concreto, nos permite ahora obtener adoquines de alta resistencia, variadas formas e incluso atractivos colores. Entre las ventajas de usar este tipo de elementos para pavimentar, podemos mencionar las siguientes: son fáciles de fabricar, son estética y funcionalmente similares a los típicos empedrados, son fáciles de reparar o mantener; no requiere personal especializado para su colocación y luego de culminada, la vía se abre de inmediato al tránsito y lo que es más importante a un costo de hasta 30% más barato que el pavimento de concreto.
Frente a los
posibles prejuicios que generalmente surgen ante las innovadoras o
nuevas propuestas, traslado al lector para conocer algo de historia en
relación al tema.
HISTORIA Y APLICACIÓN DE LOS ADOQUINES.
El uso de los
adoquines (Adoq Kan) como alternativa de pavimentación es muy remoto.
Probablemente los primeros en usarlo fueron las civilizaciones asentadas
entre los ríos Eufrates y Tigres de la antigua Mesopotamia, alcanzando
mayor desarrollo y esplendor con el Imperio Romano, el que ha dejado en
esta campo un legado histórico a la humanidad como la famosa y turística
VÍA PIA (Suelo mejorado con puzolana y cubierto con lajas o piedras
planas), la ciudad de Mérida y LOS CAMINOS DE JESÚS (Mosaicos
ornamentales de losetas).
En el Perú del
siglo XII, sin conocer la existencia del viejo mundo, con el esplendor
del gran Imperio Inca, se desarrolló la mejor técnica vial de América en
caminos que unieron los cuatro suyos para la consolidación del llamado
TAHUANTINSUYO. Los Incas usaron pavimentos adoquinados de extracción
natural, es decir líticos o rocas de diferente forma y tamaño, para
construir lo que actualmente es un invalorable patrimonio cultural o
legado histórico conocido como los CAMINOS DEL INCA.
Foto N° 3 Empedrado en la ciudad romana de Mérida, conservado como reliquia. |
A inicios del
siglo XIX, con el descubrimiento del automóvil, se comenzó a buscar
nuevas tecnologías para obtener una mayor resistencia frente al tránsito
vehicular, dando como resultado la invención de los pavimentos
asfálticos y los de concreto.
Foto N° 04.- Vía peatonal empedrada. Acequia central de desagüe techada. (España). |
El uso actual de
estos pavimentos se justifica en las grandes vías de transporte
terrestre pesado, como las de circunvalación y de comunicación regional;
pero otro puede y debe ser el tratamiento de las vías urbanas o calles
de una ciudad.
Foto número 5 |
Por esto el
avance tecnológico del siglo XX, permitió que a mediados del mismo se
reinvente el ADOQUÍN como pieza prefabricada, tomando no solo diversas
formas Foto 5 sino
también variados colores. Las ventajas de orden técnica, económica,
estética, social y ecológica, han propiciado que su uso aumente de
manera exponencial, a tal punto que en 1960 en Alemania y Holanda se
desarrollaron equipos y maquinarias de alta tecnología para la
producción de adoquines de concreto.
En 1970 este sistema de producción la adoptaron Australia, Japón, Inglaterra, Nueva Zelanda y Sudáfrica.
En 1973, la
tecnología es transferida de Alemania a Canadá y Estados Unidos. Treinta
años después, en este último país, el año 2003 se fabricaron más de 60
millones de metros cuadrados de adoquines de concreto.
Desde el 2005,
Alemania produce anualmente, al menos cien millones de metros cuadrados
de adoquines de concreto intertrabado (machihembrado).
En el 2003, en el Perú felizmente se aprobó la Norma Técnica Peruana NTP 339 611 2003, que establece los requisitos que deben cumplir los adoquines de concreto para la pavimentación de vías.
Foto N° 6 |
Herencia felizmente conservada en la calle San Blas – Cuzco (Perú).
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES.
- Las grandes
potencias de Europa usan actualmente y cada año con mayor intensidad,
adoquines prefabricados en la pavimentación de las calles de sus más
importantes ciudades, por razones climáticas, ecológicas, turísticas,
culturales, sociales y económicas.
- Finalmente abrigamos la esperanza que las calles que se han salvado de la invasión del cemento, sean pavimentadas usando las soluciones de la alternativa planteada. Sucre es tierra de gente inteligente y valiente; pues en adelante, si un Alcalde más persiste en el desatino, ha de ser por algún tipo de interés personal. Entonces solo quedará apelar a la dignidad del pueblo que felizmente va despertando y esperar que actúe con manifiesta y justa rebeldía.
- El razonamiento
filosófico constructivo es aceptar que es necesario un puente de
transición entre lo tradicional y lo moderno. De este modo no se olvida a
lo tradicional al punto de que posteriormente se fosilice, ni se asume
con desatino a la modernidad a tal punto que pronto se volatilice.
- Hemos leído y
escuchado muchas propuestas tendientes a hacer se Sucre una ciudad
turística, sin embargo en la pavimentación de sus calles se ha navegado
contra la corriente. Ojalá que en adelante se proyecten y se ejecuten
obras tendientes a enmendar errores y a insertar al distrito dentro del
segundo circuito turístico más importante del Perú, en el mismo que ya
están comprendidos la ciudad de Cajamarca, el museo de Leymebamba y la
fortaleza de Kuelap.
- Para lograr lo
anterior es indispensable incidir en plantear la variante de la
carretera Cajamarca-Celendín, a partir del caserío Cruzconga, hacia San
Juan de Tincat, La Quinuilla, “El velo”, “Vigasmayo”, hasta llegar al
abra “El vaquero”. Desde aquí con el desarrollo de las curvas necesarias
empalmar en el caserío La Laguna con la carretera Loma del Indio –
Sucre. Esta variante conectaría directamente a la ciudad de Sucre con la
mayoría de sus anexos o caseríos del ámbito rural, devolviéndole su
dinámica comercial de antaño. _Esta idea la expuse por primera vez en
una Asamblea General del Pueblo de La Quinuilla llevada a cabo el 18 de
abril de 1991, en un ambiente del Centro Educativo N° 82429 que entonces
dirigía el Prof. Edinson Cotrina Aliaga; posteriormente la expuse en
Lima al Prof. Bonifacio Mariñas Casahuamán, en diciembre de 1998 y antes
de que iniciara su polémica gestión como Alcalde de Sucre. Finalmente a
partir de mayo de 1999 el pueblo de Sucre la conoció con mayor
amplitud, gracias a que Douglas Rojas Zegarra, entonces ciudadano común y
posteriormente Alcalde de Sucre, lo publicara como suya y a modo de
perfil en la revista “El Labrador” N° 08, que se edita en Cajamarca
gracias a la Asociación de sucrenses residentes en esa ciudad (ASUC). A
la fecha es lamentable comprobar que ninguno de los últimos Alcaldes de
Sucre, se haya preocupado por la elaboración del proyecto de la variante
planteada a efectos de gestionarlo al más alto nivel, como una
reformulación o replanteo del proyecto mayor de “Rehabilitación y
mejoramiento de la carretera Cajamarca - Celendín - Balsas”. Este
proyecto mayor ya existe y está en ejecución en su primera etapa hasta
la progresiva Km. +26.00 o tramo Baños del Inca –La Encañada. Sabemos
que para las siguientes etapas, si contempla variantes pero que en nada
beneficiarán a la ciudad de Sucre. Ojalá la próxima gestión edil que
toque elegir próximamente a los sucrenses, tome la comentada idea como
tarea URGENTE y el proyecto como prioritario para su elaboración; sino
como siempre, en el futuro los sucrenses seguiremos viviendo de
recuerdos y lamentos. Aún se puede estar a tiempo y como reza el antiguo
adagio: “No hay peor gestión que la que no se hace”.
- Pueblos andinos
de estructura colonial como la ciudad de Sucre, son de por si un imán
para los turistas que buscan lunares donde revivir el pasado de las
civilizaciones milenarias. Los turistas que van a la sierra no buscan
pueblos en cuyas calles haya cemento, ni metales y cristales en los
muros o techos de sus casas. Lo que ellos buscan es visitar los pueblos
andinos que conservan la herencia de su pasado, para ver a su gente
pacífica, noble y hospitalaria realizando sus faenas rutinarias; para
admirar su folklore y participar de sus costumbres, música y danzas
conservadas desde hace centurias. Eso los hace felices espiritualmente, y
por eso pagan lo que sea, con tal de tener acceso a todo esto que los
especialistas llaman turismo vivencial.
- Sugerimos que
como una de sus primeras acciones, el próximo gobierno municipal de
Sucre, de una ordenanza declarando la intangibilidad de su patrimonio
urbano y conforme una Comisión Técnica de vecinos, encargada de evaluar y
aprobar las remodelaciones o modificaciones constructivas que se
pretendan hacer, para no malograr o destruir la arquitectura de la
ciudad.
- Finalmente abrigamos la esperanza que las calles que se han salvado de la invasión del cemento, sean pavimentadas usando las soluciones de la alternativa planteada. Sucre es tierra de gente inteligente y valiente; pues en adelante, si un Alcalde más persiste en el desatino, ha de ser por algún tipo de interés personal. Entonces solo quedará apelar a la dignidad del pueblo que felizmente va despertando y esperar que actúe con manifiesta y justa rebeldía.
Lima, agosto del 2006.
Tomado de la revista Eco Sucrense, N° 2.
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